El Prof. Dr. Jorge Manuel Rodríguez Almenar arrancó la conferencia recordando el origen de la Sábana Santa y su historia, que ya pudimos ver en su primera conferencia "La Sabana Santa a la luz de la ciencia". Pero en esta segunda se centró en explicar como esa imagen de la Sábana Santa a lo largo de la historia ha abierto una iconografía que ha evolucionado desde el s. IV hasta nuestros días. Con toda la documentación consultada y con las representaciones que han llegado hasta nuestros días puede destacarse que la llamada Síndone de Turín, la Sábana Santa, existió antes del siglo VI y que fue conocida con el nombre de Imagen de Edesa, hasta su llegada Constantinopla a final de siglo X.
Tanto en su primer período, bajo la presentación de Mandylión, como a partir del siglo XI, una vez desvelada su auténtica identidad, influyó decisivamente en el establecimiento de los rasgos del retrato de Jesús de Nazaret y, en la práctica, directa o indirectamente en la mayor parte de los tipos iconográficos bizantinos referidos a él.
Arrancó la conferencia centrándose en el análisis de los documentos que se refieren a la Imagen de Edesa. El rostro tradicional de Cristo procede de un arquetipo concreto, la llamada Imagen de Edesa, pero esa imagen en realidad era la tela, el Síndone, que se conserva actualmente en Turín.
Hay que destacar que existen escasos textos que hacen referencia a la mortaja de Cristo, a lo que hay que sumar que los primeros cristianos rechazan representar la imagen de Jesús. Pero aquí aparece la leyenda de la Imagen de Edesa, de la que se recogen documentos que ya se refieren a ella, que sirivieron para conocer a través de las descripciones cómo era el objeto. Estas referencias históricas documentan la existencia real de la Imagen de Edesa, también conocida como Mandylión, su traslado a Constantinopla. El Mandylión siempre fue la Síndone, que estaba plegada en ocho partes, y tan sólo se dejaba ver el rastro de Jesús. Además, estaba cubierta por una especia de 'toalla' judía. Al llegar a Constantinopla, los bizantinos tomaron conciencia de ello, y la protegieron hasta que en la cuarta cruzada se robó a manos de cruzados franceses. La historia de la Síndone está perfectamente documentada a partir de su presencia en Lirey, Francia. No hay duda de qué es la misma tela que hoy día se conserva en Turín, sin que ningún autor ponga la más mínima objeción.
Por último, el ponente hizo un minucioso estudio histórico artístico de la iconografía de Jesús a partir de la Síndone. En los tres primeros siglos del cristianismo se representó a Jesús sin un rostro fijo, ya que no estaba bien visto representar a Jesús, la aparición del "retrato" del rostro de Jesús empieza a concretarse en el siglo IV y que adquiere unos rasgos prácticamente exclusivos a partir del siglo VI. Pero fue la Imagen de Edesa, la considerada Aquiropita, "no hecha por mano", el origen del retrato de Jesuscristo. Cada vez son mayores los puntos de coincidencia visual entre la Imagen de Jesús y la iamgen que estaba en la Síndone. La tela que se mostraba en Edesa dejó una serie de huellas en la Síndone si se hubiese mostrado con la apariencia del Mandylión, de ahí los pliegues de la Sábana Santa. Son comparables la impronta de la Síndone con los rasgos que contienen los antiguos retratos de Jesús.
Pero a lo largo de la historia el Mandylión tuvo diversas formas de ser mostrado y por eso que fue originando un tipo iconográfico diferente con cada cambio que tenía cada que se mostraba. Se descubre la Síndone en Bizancio y tuvo una incidencia clara sobre la pintura religiosa bizantina, aquella la aparición súbita de la supuesta “mortaja” de Cristo, supuso el origen de algunos tipos de esa época. Asimismo, comenzó a representarse la imagen de la crucifixión hasta la Edad Media. La Síndone incidió en la representación del crucificado y en la nueva espiritualidad que se origina en torno al sacrificio de Cristo.
También se ha relacionado con la Síndone la Akra tapeinosis, (la "suprema humillación") conocido en Occidente como la Imago pietatis o el Varón de dolores. Cada vez existe una mayor dependencia de la imagen sindónica de cuerpo entero, una vez la Síndone se empezó a mostrar íntegramente. Se comienza a representar la Sábana Santa sujetada por ángeles, ya que se comenzó a desplegar y mostrarse entera.