La Escuela de Salud del Ateneo Mercantil de Valencia, con la que colabora la Fundación Ribera Salud, acogió ayer una interesante conferencia de los doctores Vicente Palop y Patricia Roth sobre fibromialgia, sus síntomas y las dificultades para el diagnóstico, que en muchos casos hace sufrir a las pacientes, en su mayoría mujeres. “No hay una prueba diagnóstica concreta para la fibromialgia, pero en la Unidad de Fibromialgia del hospital Ribera IMSKE tipificamos el dolor, la fatiga, los problemas de sueño y otros síntomas de este síndrome, que tanto condiciona a las pacientes para ofrecerles un diagnóstico y abordar su tratamiento”, ha explicado el doctor Palop.
Alrededor de 70 personas se reunieron ayer para escuchar los consejos de dos de los especialistas con más experiencia y reconocimientos en esta materia en España. Solo el doctor Palop ha atendido a más de 12.000 mujeres afectadas en toda España, ha participado en la revisión monográfica de La enfermedad de fibromialgia y de la Guía Fisterra. Tras la integración del hospital Ribera IMSKE en el grupo sanitario Ribera, el doctor Palop y la doctora Roth pusieron en marcha la Unidad de Fibromialgia en el hospital Ribera IMSKE, que cuenta con fisioterapeutas, nutricionistas, reumatólogos, especialistas en tratamiento del color y personal de Enfermería cualificado para atender a estas pacientes. Para ambos, el diagnóstico certero y “la atención personalizada a las pacientes” es clave en su tratamiento y recuperación. “Es muy importante la escucha y dedicar tiempo a las pacientes”, explicaron.
Se estima que en España hay alrededor de 900.000 personas con fibromialgia, una dolencia que afecta especialmente a mujeres entre los 30 y los 60 años, pero que también es diagnosticado en personas más jóvenes y en hombres. Sin embargo, según el Instituto Nacional de Estadística, solo hay diagnosticadas alrededor de 276.000 pacientes.
El doctor Palop explica que las pacientes “tienen síntomas en diferentes órganos, lo que repercute en su estado de ánimo, les genera ansiedad y provoca, incluso, un deterioro cognitivo”. “Todas tienen un hilo conductor común, que es el dolor, y a veces ese dolor indefinido se convierte en crónico, lo que provoca insomnio, en ocasiones ansiedad y depresión, y el consiguiente deterioro cognitivo que no permite recordar o mantener la atención”, explican los especialistas en fibromialgia del hospital Ribera IMSKE. “Es un dolor tendinoso y muscular, fundamentalmente”, añaden.
Valoración completa de la paciente en consulta
Para llegar a un diagnóstico certero, tal y como explicaron ayer los especialistas, en la Unidad de Fibromialgia del hospital Ribera IMSKE se hace una valoración completa de las pacientes y un test para conocer “con exactitud los síntomas”, recalcaron. Y a continuación “se plantea un abordaje personalizado e integral para el tratamiento, que puede abarcar diferentes especialidades, siempre bajo la supervisión de esta unidad especializada y con una comunicación constante y fluida entre los profesionales que tratan a la misma paciente”.
El doctor Palop y la doctora Roth destacaron también ayer la importancia de la historia clínica de la paciente y de la importancia de esa valoración inicial completa para evitar un mal diagnóstico o la falta de diagnóstico. “Publicamos dos casos de mal diagnóstico de pacientes a quienes se les atribuía fibromialgia y que en realidad habían consumido demasiada dosis de vitamina A por problemas de faringitis aguda. La vitamina A es una vitamina liposoluble que se deposita en la grasa, fundamentalmente en el hígado, los pulmones y el cerebro, y que produce dolor generalizado, produce fatiga y produce algunas alteraciones que pueden confundirse con la fibromialgia. Pero al retirar la vitamina A, estas pacientes mejoraron completamente”, aseguró.