Francisco José Valera y Álvaro Anguix, los autores de un enjundioso ensayo "Un lugar de la Mancha: la patria de Don Quijote al descubierto", analizaron la primera edición de "El Quijote" de cabo a rabo y con lupa, como si de detectives literarios y aventureros históricos se tratase, para resolver con fortuna y acierto el más famoso y conocido de los acertijos novelescos, formulado hace más de cuatro siglos en el inicio de la gran obra cervantina: "En un lugar de la Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme…"
¿Cuál es ese famoso lugar? ¿Por qué Cervantes no quería recordar su nombre? En esta conferencia se dio cumplida respuesta a esas dos preguntas con una larga lista de argumentos a cuál más interesante, teniendo en cuenta la vida y circunstancias del Manco de Lepanto, tomando como base documentos históricos, mapas antiguos y referencias varias, con rigor, seriedad y de manera muy convincente.
Una conferencia en la que se dio luz, ya que los dos ponentes resolvieron el mayor enigma literario que han visto los siglos. Ya sabemos el nombre del famoso lugar de la Mancha y el motivo que tenía D. Miguel para querer olvidarlo. Una investigación que ha durado 20 años y que les ha llevado hasta Munera, en Albacete.