El evolucionismo remite a cualquier cambio gradual, bien desde un punto de vista biológico o sociológico. Desde la biología, el evolucionismo es la teoría que afirma que todos los seres vivos actuales son el resultado de cambios graduales a partir de antecesores comunes. El evolucionismo se relaciona con el darwinismo. Pero a finales del siglo XX nace la sociobiología, una disciplina que estudia las bases biológicas del comportamiento social.
Las primeras referencias sobre evolucionismo aparecen ya en el s. VI a. C con los filósofos presocráticos. Anaximandro de Mileto habla de un evolucionismo rudimentario, ya que según él los primeros seres vivos nacieron de la humedad y que los hombres vienen de los peces. Algo más de un siglo después, Empédocles de Agrigento destaca que los seres vivos nacieron de la tierra, con miembros y órganos unidos al azar. En el siglo XVIII, Lamarck propone la teoría del transformismo (las especies se transforman para adaptarse al medio). Hasta que llega Charles Darwin quien afirmó que las especies evolucionan principalmente por medio de la mutación azarosa y la selección natural.
La llegada del libro de Darwin 'El origen de las especies' en 1859 supuso un cambio científico y social de primera magnitud. Y el impacto del darwinismo fue mayor con la explicación de los mecanismos de la herencia a partir de las leyes de Mendel. No solo cambió el desarrollo científico, sino que marcó todas las teorías sociales y económicas de los siglos XIX y XX. Pero el evolucionismo de Darwin también tuvo opiniones en contra importantes.
Las implicaciones filosóficas, sociales, éticas y científicas del planteamiento evolucionista desencadenaron un proceso que cambió la ciencia y la sociedad a partir del siglo XIX.