El Salón Sorolla del Ateneo Mercantil fue el escenario escogido por Expoforum Valencia para la excelente conferencia que dio D. Luis Oria, ingeniero de minas, profesor del Aula de Majors de la Universitat Jaume I de Castelló y miembro del Concurs Internacional de Pirotecnia de las Fallas en 2008 y 2009 y de les Mascletaes en las fiestas de la Magdalena de Castellón desde 2016 hasta ahora.
Oria introdujo a los numerosos asistentes en el origen del fuego, desde el famoso fuego griego, pasando por su utilización en las guerras hasta la llegada de la pirotecnia a Valencia fechada en 1238 y, de alguna manera, ratificada en el Llibre dels Fets en la víspera del 9 d´Octubre cuando ya hubo un intercambio de elementos pirotécnicos no bélicos.
Ya en el s. XVI, en la ciudad de Valencia se forma el gremio de polvoristas (antecesores de los pirotécnicos) como encargados de fabricar la pirotecnia que se utilizaba en ese momento. A pesar de ello, el gran salto de calidad de la pirotecnia valenciana se produce en la Exposición Regional de 1909 en donde se llegaron a disparar 96 actos pirotécnicos en 18 días de tracas continuadas, un hecho- tal y como comentó- "que se convirtió en el antecedente histórico de las 18 mascletaes que se disparan en la Plaza del Ayuntamiento los días previos a San José".
A partir de 1714, después de todas las misas mayores de las fiestas patronales de todos los pueblos valencianos, a las puertas de las iglesias y de las ermitas, se plantaban en el suelo las tracas que se podían permitir el coste, para ser disparadas 7 en Toc de Deu y el resto cuando la misa mayor terminara.
En 1830 llega el color con los pirotécnicos italianos que conseguían las diferentes tonalidades añadiendo sales metálicas como estroncio para el rojo,bario para el verde, cobre para el azul y sodio para el amarillo. También empezó a utilizarse el clorato de potasio para aumentar el brillo.
A pesar de todo, no fue hasta el primer cuarto del siglo XIX cuando se inició la etapa moderna de la pirotecnia gracias al francés Chartier, quien inició el empleo de dos nuevos agentes químicos en las composiciones de los fuegos artificiales: el clorato de potasa y el nitrato de estronciana. Fue entonces cuando la sociedad empezó a aàsionarse por la magníficas estrellas de púrpura que salían de los cohetes y las bombas, resplandeciendo en el espacio como meteoros luminosos.
Fue hacia la mitad del siglo XIX cuando los estudiosos de la pirotecnia publicaron en el Boletín de la Sociedad Química de París, las combinaciones para producirlos fuegos artificiales. Además,se pudieron conocer , ya no empíricamente, sino por medio de fórmula, los efectos que producían determinados elementos. Con esto, el arte pirotécnico se enriqueció y se difundió aún más.
A partir de aquí, Oria explicó a los presentes la manera correcta de interpretar una mascletà, diferenciando las tres fases de inicio, desarrollo y apoteosis con un comienzo que siempre es una traca valenciana, un espectaculo que dijo "no se entiende fuera de Valencia ya que además de ser un festival de colores es un espectaculo de los sentidos muy dificil de comprender si no eres valenciano".