Este jueves el Ateneo Mercantil de Valencia se vistió con sus mejores galas para homenajear a D. Enrique Mora Guillén, una de las figuras más representativas de nuestra institución social, cultural y mercantil. El afectivo acto contó la presencia de más de 200 ateneistas que no se quiseron perder la entrega de la insignia de oro y brillantes, la más alta distinción de la institución, hacia D. Enrique, y que premiaba los merecimientos notables, así como los servicios extraordinarios prestados, y la trascendencia de la labor realizada por quien fuera el Secretario General del Ateneo Mercantil e impulsor de la Tertulia Taurina.
Son más de 60 años en el Ateno Mercantil, no en vano tiene el carnet de socio número 7 de nuestra entidad, lo que viene a reflejar lo bien conoce esta casa. Pero no sólo por los años que suma al frente sino por los importantes cargos que ha ocupado en las últimas décadas: Vicesecretario Segundo (1979-1985), Vocal Octavo (1989-1991), Secretario General (1991-2005) y Vicepresidente Segundo (2005-2009). Su enorme aportación y su valentía durante estos años han sido vitales para el crecimiento del Ateneo en la ciudad de Valencia.
A lo largo de estas seis décadas en la institución, D. Enrique ha sido un docente de los valores ateneístas, ya que no se ha cansado de transmitirlos de generación en generación, y hoy es tu hijo D. Enrique Mora Rubio, actual Vicepresidente 2º del Ateneo Mercantil de Valencia, el que continúa con la herencia de su padre. Luchando de manera eficaz por la modernidad y el protagonismo del Ateneo. Todas la personas que este jueves se reunieron en el Stolz le mostraron su admiración: besos, sinceros abrazos, cientos de gestos de complicidad y miles de sonrisas bajo los cinco grandes murales de Ramón Stolz.
Impulsor de la Tetulia Taurina
D. Enrique es un gran aficionado a la tauromaquia por lo que en 1992, siendo Secretario General, impulsó la creación de la Tertulia Taurina del Ateneo, permitiendo que los aficionados comenzaran a reunirse los jueves por la tarde para intercambiar impresiones y experiencias en torno al mundo de los toros. Una Tertulia que goza de una muy buena salud gracias al trabajo incansable de uno de sus grandes amigos, Juan Coca.
Gran recuerdo en los trabajadores del Ateneo
D. Enrique nació en Valencia en el año 1925. Viudo y padre de tres hijos, ha sido un un incansable trabajador, de caracter afable y con un firme compromiso por la cultura, la formación y las tradiciones valencianas. Ha sido uno de los abogados más prestigiosos de Valencia y ha despertado la admiración de todos los que le han rodeado por los valores qie inculcó en los ateneístas. El buen recuerdo que guardan los trabajadores de Alteno Mercantil es un fiel reflejo de todo su legado. El acto comenzó con el coloquio del matador de toros y apoderado, D. Santiago López, quien habló de su trayectoria en los ruedos y como empresario taurino.