En esta nueva conferencia del Ciclo 'El Antiguo Egipto', la presidenta de la Asociación Española de Egiptología, Rosa Pujol, nos habló de una figura clave entre las Dinastías XVIII y XIX, el faraón Horemheb, un personaje clave en la historia de Egipto.

Rosa Pujol desgranó cinco puntos claves: Sus orígenes y su primer matrimonio con Amenia, su exitosa carrera militar, su regencia de Tut-anj-amon y el principe heredero. Su tumba en Saqqara, su confusión sucesoria y su segundo matrimonio con Mutnedjemet. Además, nos informó sobre su figura como faraón, que puso en contexto con su política interior/exterior, su imagen de gran usurpador, el Decreto y los monumentos. Por último, nos habló sobre la duración del reinado y su muerte sin heredero.

Uno de los sepulcros más atractivos del Valle de los Reyes es el de Horemheb. Este general, cuyo nombre significa en egipcio «Horus está en fiesta», fue el último faraón de la dinastía XVIII y gobernó Egipto entre 1323 y 1295 a.C., tras un período convulso y de desorden político, aunque su reinado fue bastante tranquilo.

Una vez pacificado el país, Horemheb se embarcó en varios proyectos constructivos importantes, entre ellos la gran sala hipóstila del templo de Karnak y su tumba en el Valle de los Reyes (KV57), que posiblemente quedó inacabada ya que el faraón murió antes de la finalización de los trabajos. Pero no fue ésta la única tumba que Horemheb había preparado para su eternidad: antes de ascender al trono, mientras aún era comandante en jefe de los ejércitos de Akhenatón, Horemheb había encargado una magnífica tumba que nunca ocupó en la necrópolis de Saqqara, cerca de Menfis.

Nada más acceder al trono de Egipto, Horemheb decidió construirse una magnífica tumba que se ha convertido, desde su descubrimiento en 1905, en una de las principales atracciones del Valle de los Reyes. La tumba de Horemheb en la necrópolis tebana es una sucesión de corredores y cámaras de casi 130 metros de largo.

Por su parte, el Sarcófago de Horemheb mide 2,72 metros de largo por 1,15 de ancho. En él se puede ver a la diosa alada Selkis, con un escorpión sobre su cabeza y en la cámara del sarcófago destaca la escena representada en un muro que es el juicio de Osiris.

La sepultura de Horemheb fue hallada un 22 de febrero de 1908. Los arqueólogos dejaron al descubierto los escalones que descendían hasta la puerta de entrada y una vez retirados los escombros, colocados intencionadamente para bloquear el paso, apareció un largo corredor que penetraba bajo tierra unos 128 metros y conducía sucesivamente a dos cámaras monumentales, en las que se alzaban enormes pilares tallados en la propia roca.

La tumba tiene una superficie total de 473 metros cuadrados y destaca por su espléndida decoración mural. Sin embargo, en su primera exploración Davis y Ayrton hallaron dispersos restos de momias, figurillas y otros objetos, signo evidente de que por allí habían pasado los saqueadores en la Antigüedad. No se trataba, por tanto, de una tumba real intacta.

Podcast de la conferencia:

 

Galería de Imágenes: