La Tertulia Taurina del Ateneo Mercantil de Valencia vivió una sesión especialmente concurrida con la visita del torero conquense Alejandro Peñaranda, natural de Iniesta, quien regresó al salón taurino de la institución ante una gran expectación.
El público llenó por completo la sala —con asistentes incluso de pie— y recibió al diestro con una cálida ovación que marcó el tono de toda la jornada. La tertulia fue moderada por Nicasio Jiménez, seguidor del torero y paisano suyo, lo que propició un encuentro cercano, animado y cargado de reflexiones relevantes para el presente y futuro del joven matador.
Un torero orgulloso de sus raíces
Peñaranda recordó sus comienzos en su localidad natal, un pueblo con tradición taurina del que han surgido figuras como Chicuelo II, José Antonio Moreno o José Manuel Prieto. Visiblemente emocionado, rememoró el papel fundamental que tuvo Prieto en sus inicios, cuando aún carecía de referentes directos y no había ingresado en la Escuela de Tauromaquia de Albacete. Ese apoyo inicial marcaría los primeros pasos de una trayectoria que hoy continúa consolidándose.
La confianza de su apoderado
Durante la tertulia intervino también su apoderado, Luisma Garrido, quien explicó cómo comenzó a seguir a Peñaranda en 2020, en una novillada sin picadores celebrada en la Plaza de Toros de Valencia. Aquel festejo dio paso a un contacto continuo con la Escuela de Albacete y, poco después, a una relación profesional basada en confianza mutua.
La faena que le otorgó a Peñaranda la victoria en el certamen castellano-manchego Promesas de Nuestra Tierra, frente al novillo Lagartijo de “La Quinta”, fue determinante para consolidar su apoderamiento. Desde entonces, torero y apoderado han formado una dupla poco frecuente por su juventud y su potencial.
Puertas grandes y evolución en los ruedos
El diestro hizo un repaso de sus actuaciones más destacadas, entre ellas sus dos puertas grandes consecutivas en Valencia: la primera en octubre de 2023, que le abrió las puertas de la Feria de Fallas de 2024, y la segunda el 9 de marzo de ese mismo año, cuando volvió a salir por la calle Xàtiva entre la algarabía de los aficionados. También mencionó sus triunfos en el certamen madrileño “Cénate Las Ventas”, así como sus actuaciones en Aire-sur-l'Adour, Mugron y Almorox, donde se despidió como novillero cortando dos orejas.
Peñaranda recordó cómo su alternativa estuvo inicialmente prevista en una plaza de primera categoría y en una fecha señalada, pero finalmente fue cancelada. Lejos de rendirse, el torero buscó otra oportunidad y la encontró el 24 de agosto de 2024, en Tarazona de La Mancha, donde tomó la alternativa con un encierro de Salvador Domecq, compartiendo cartel con Sebastián Castella y Borja Jiménez. Su paso al escalafón superior fue triunfal, cortando cuatro orejas.
Confirmación en Madrid y retos posteriores
El conquense también relató su confirmación en Madrid durante el ciclo isidril, acompañado en el cartel por Manuel Escribano y Joselito Adame. Reconoció la presión que sintió, al ser un torero muy nuevo, pero también el respaldo del sector más exigente de la plaza. Después llegaría su primera corrida de toros en Casas Ibáñez, con reses de Victorino Martín, un desafío para el que —según confesó— acudió con una preparación basada en entrenamientos guiados por el matador Sergio Serrano. A pesar de modificar sus planes al llegar al patio de cuadrillas, logró un importante triunfo y un aprendizaje fundamental.
Ya instalado en un momento de gran exigencia, toreó en plazas como Cuenca, Albacete y Munera, enfrentándose a ganaderías de prestigio como La Quinta, Baltasar Ibán o Montalvo. Peñaranda reconoció las dificultades atravesadas con la espada, que le llevaron a perder trofeos importantes, aprendiendo así de la delgada línea que separa el éxito del revés en el toreo.
Mirada al futuro
En el turno de preguntas, donde participaron reconocidos aficionados, Peñaranda expresó su deseo de que los empresarios valoren sus triunfos y le tengan en cuenta para la temporada 2026. Asimismo, señaló la importancia de que las figuras del toreo faciliten el relevo generacional, dando espacio a los jóvenes en los carteles y abriendo plaza cuando sea necesario para garantizar el futuro de la tauromaquia.
La tertulia concluyó en un ambiente de cercanía y agradecimiento, dejando clara la admiración del público por el joven matador. La próxima sesión de la Tertulia Taurina tendrá lugar la semana siguiente, con la visita del subalterno José Luis Villaverde, de 18:00 a 20:00 h.
Texto: Álvaro Meseguer