La alimentación saludable, como es la dieta mediterránea, centró la conferencia del doctor Alberto Grima Serrano, cardiólogo, jefe de la Unidad de Cardiología Laboral y Rehabilitación Cardíaca de la Mutua ASEPEYO de Valencia y responsable autonómico de enfermedades cardiovasculares, quien nos enseñó, además, a comer de manera saludable.
Se comenzó abordando los antecedentes históricos que han llevado a la dieta mediterránea a ser considerada la mejor del mundo. Ya en los año 50 los médicos la recomendaban por ser cardiosaludable y años más tarde la UNESCO la incluyó como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por sus beneficios.
Asimismo, en la conferencia se recordaron las necesidades nutricionales y los nutrientes esenciales que requiere todo individuo que se clasifican en carbohidratos, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. Incluso el agua. La dieta mediterránea, en su ajustada medida y con una alimentación moderada, es la que mejor aporta estos nutrientes esenciales
Posteriormente, el doctor se adentró en las enfermedades ligadas a una deficiente alimentación, deteniéndose especialmente en la obesidad, especialmente en la infantil. Y es que, la obesidad en los niños es grave y crónica. Con el tiempo, puede llevar a otros problemas de salud, incluyendo diabetes, enfermedad cardíaca y algunos cánceres.
El acto finalizó recordando los alimentos funcionales, así como los mitos y realidades de la dieta mediterránea. Hay cosa positivas y negativas en la dieta mediterránea: lo positivo es el consumo de grasas Omega 3 antiinflamatorias, monoinsaturadas y saturadas, un muy bajo consumo de Omega 6 proinflamatorio y si eliminamos lo incorrecto y convertimos su base de cereales y almidones en alimentos restringidos y los sustituimos por más vegetales, en realidad estaremos haciendo una dieta mediterránea corregida y mejorada.