El Ateneo Mercantil de Valencia ha retomado las conferencias con “Confidencias a Sorolla. Teodoro Andreu: su amistad al descubierto”. Esta conferencia ha sido impartida por dos grandes conocedoras de ambos pintores, Mónica Ibáñez Bartolomé, licenciada en Bellas Artes, restauradora en el MUMA de Alzira e investigadora, y Sofía Barrón Abad, doctora en Historia del Arte, investigadora y comisaria de exposiciones.
En una sala abarrotada se porfundizó, a través de una colección epistolar, que el pintor Teodoro Andreu envió a su querido Maestro Joaquín Sorolla, custodiada actualmente en el Museo Sorolla de Madrid, descubrimos el lado más humano, más íntimo y personal de dos artistas que compartieron una misma obsesión por la captación de la luz en su pintura, un amor desmesurado a su tierra natal y una necesidad sobrecogedora de mantener intacto su núcleo familiar, a pesar de los avatares y frecuentes viajes que su profesión les demandaba.
La estrecha y entrañable relación que existió entre ambos queda claramente al descubierto a través de estas cartas, donde Andreu se confiesa con su maestro y amigo, desnudándose completamente ante la persona que le enseñó, no sólo una nueva visión de la pintura a través de la luz, sino también la importancia de la verdadera amistad.
El objetivo de la conferencia fue, que los asistentes se sumergieran en la vida personal de estos grandes pintores hasta sentirlos como personas cercanas, mostrando su lado más humano, para así entender mejor el fuerte vínculo de amistad que les unía.
Dario Valbuena, graduado en Historia del Arte, realizó la lectura en directo (simulando ser Andreu), de las cartas seleccionadas previamente por ser las más relevantes, dejando un pequeño espacio temporal entre ellas para la intervención de las ponentes.
Por su parte Sofía Barrón y Mónica Ibáñez, se centraron en comentar y ampliar información contrastada que se desprendía de cada una de las epístolas (Sorolla-Andreu), contextualizándolas historiográficamente y adaptando el discurso al contenido de la misiva.
Puesto que únicamente se conserva la colección epistolar de Andreu, no la de Sorolla, fue fundamental el papel que la ponente especializada en valencianos del siglo XIX-XX, Sofía Barrón, desempeñó durante la disertación.
El discurso fue acompañado de un power point que proyectaba las cartas originales del puño y letra de Andreu durante su lectura en directo, así como imágenes relacionadas con el contenido de las mismas: obras de arte, fotografías familiares, fotografías de lugares que frecuentaban, objetos personales de los pintores, etc.
Se concluyó la conferencia con una reflexión personal de ambas ponentes, incluso se dio turno de palabra al público para que participara y preguntara curiosidades.
La última carta, en la que muere el hijo del pintor Andreu, fue leída por su nieto, José Teodoro Andreu Muñoz-Orea, el cual se desplazó desde Salamanca para asistir a la conferencia. Con voz rota por la emoción, logró conmover a los asistentes.
La ponente Mónica Ibáñez, aprovechó para invitar a los asistentes a la próxima inauguración de la remodelación de la sala del pintor Teodoro Andreu, que se llevará a cabo el próximo 18 de octubre, a las 19,30h. en el Museu Municipal d’Alzira-MUMA. Además, se dará una pequeña charla de la restauración de una de sus obras de gran formato, Tres roses en un pomell.
También aprovechó para pedir a los asistentes que tuvieran obra de Andreu, que si podían darle información sobre sus obras particulares para realizar la catalogación razonada de las mismas y poder incluirlas en su tesis doctoral, titulada: Teodoro Andreu Sentamans (1870-1935). Catalogación y estudio analítico de su obra artística.