La Escucha Activa es escuchar activamente y con interés (centrarnos en lo que nos dicen y en comprenderlo). Además, hay que expresar que lo estamos haciendo con atención. Por tanto, no es simplemente oír a la otra persona, sino a estar totalmente concentrados en el mensaje que nos comunica nuestro interlocutor.
Parece fácil, pero este tipo de escucha requiere un esfuerzo de nuestras capacidades cognitivas y empáticas. Saber escuchar es muy importante en la comunicación y, en muchas ocasiones, estamos demasiado pendientes de lo que pensamos y de lo que decimos en vez de escuchar activamente al otro.
La metodología de la Escucha Activa: Actitudes, Habilidades y Estructura de Intervención, basada en el Modelo Humanista Counselling centrado en la persona, complementa a la formación que podamos tener sobre comunicación. Abre un nuevo horizonte a las personas que han optado por conocerla y formarse en ella. Al alcance de toda persona por su sentido práctico y estructura sencilla, fácil de asimilar. Aplicarla, modifica el diálogo. Evaluada por personas que se han formado. Digamos sí a la Escucha Activa.