El Ciclo Paseos Virtuales dejó atrás el centro histórico para analizar los barrios del norte, una primera conferencia sobre esta zona en la que se trató la zona más al sur en la que se destacaron edificios tan importantes como el Museo de Bellas Artes, el Real Convento de la Trinidad, el extinto Palacio del Real, asi como los Jardines de Viveros y los Jardines del Turia. Una conferencia que una vez más trajo D. Amando García.
Jardines del Turia: Es un parque urbano público de 110 hectáreas; situado en el antiguo lecho del río Turia. Este parque es uno de los más visitados de Valencia y de España. Es el mayor jardín netamente urbano de España, con una longitud muy próxima a los 10 kilómetros. Se fundó en 1986 varios decenios después de la Gran riada de Valencia.
Puente del Real: El puente del Real toma el nombre por su cercanía al Palacio del Real al cual prestaba servicio de paso. También fue conocido como Puente del Temple por su cercanía al portal que se abría en la muralla cristiana. Las obras del puente fueron comenzadas por Guillem Salvador, Hierony Negret y Françesc Anthon pero no consiguieron su propósito y así tuvo que ser Joan Pasqual quien lo llevara a cabo. Arena, piedras e incluso lápidas con inscripciones procedentes del antiguo cementerio del Convento de Santo Domingo se utilizaron en su construcción. El puente tenía una longitud de 167 metros y una anchura de 9,50 metros y estaba compuesto por diez arcos escarzanos de trece metros de luz, los tajamares, el paseo y las barandas con adornos de esferas eran totalmente de piedra. Hace unos años se restauraron los casilicios dedicados a San Vicente Mártir y San Vicente Ferrer, que son del s. XVIII.
Palacio del Real: Su nombre proviene del árabe "rahal" (casa de campo) o del latinizado "Reial". Es cierto que en él se alojaron muchos reyes y reinas tanto de la corona de Aragón, como de la dinastía de los Austria y de los Borbones, en las ocasiones en que visitaban el Reino de Valencia. El origen de este edificio, se corresponde con una finca de recreo o almunia musulmana, donde los reyes de la Taifa de Balansiya (Valencia) se retiraban para descansar. Mandado construir en el siglo XI para descanso del rey musulmán Abd al Aziz. En la actualidad parte de las ruinas arqueológicas que se encuentran por debajo de los Jardines del Real, han sido excavadas y permanecen al descubierto para recuerdo y memoria.
Museo de Bellas Artes: Declarado en 1962 Monumento Histórico Artístico. Junto al viejo cauce del río Turia y de los amplios y frondosos Jardines del Real destaca el edificio, de tan noble aspecto, flanqueado por dos robustas torres, donde se halla instalado el Museo de Bellas Artes de Valencia, antiguo Colegio Seminario de San Pío V. Este edificio fue erigido en el año 1683, por el arzobispo de Valencia fray Juan Tomás de Rocaberti (1676-1699), para residencia de misioneros y colegio de clérigos menores. La obra la comienza por el arquitecto Juan Bautista Pérez Castiel. El Museo de Bellas Artes de Valencia considerado por su importancia artística el segundo de España, ha gozado siempre de justa fama por el número y calidad de sus obras. Muestra una esplendida y valiosísima colección artística. La arqueología tiene buen número de piezas de los mas remotos tiempos, como lápidas, figuras en piedra y bronce, mosaicos, sarcófagos y otras obras muy interesantes labradas en cerámica y marfil.
Dentro del Museo analizó varias obras como el Mosaico de las Nueve Musas, un Plato de cerámica de cordón del s. XV, el Retablo de los Siete Sacramentos, una pintura de Juan de Juanes como La Última Cena, una pintura barroca del s. XVII como es la de San Francisco abrazando al crucificado de Francisco Ribalta y una de Sorolla como es La Grupa Valenciana.
Puente de la Trinidad: Recibe su nombre por su cercanía al Monasterio de La Trinidad. Es el más antiguo de la ciudad y el primero realizado en piedra sillar sustituyendo a otro anterior de madera. Esta obra de ingeniería fue construida entre el 1401 y el 1407 por Mateu Texidor y reedificado en el siglo XVI tras la riada de 1517. Realizado por la Junta de Murs i Valls, tambien ha recibido el nombre dels Catalans porque en su entorno se instalaron repobladores de Lérida. Analizó también una escultura del puente como es la de Antonio Ponzanelli que presenta la imagen de San Luis Beltrán, el fraile dominico.
Convento de la Trinidad: El Real Monasterio de la Santísima Trinidad. Se encuentra situado en la margen izquierda del río Turia, extramuros de la ciudad. En 1983 fue declarado Conjunto Histórico Artístico Nacional. Se trata de una fundación medieval de gran importancia y que tuvo una amplia repercusión en la vida cultural valenciana en los siglos siguientes. Es un magnífico ejemplo de la perfección alcanzada por los arquitectos, canteros y albañiles valencianos a lo largo del siglo XV, el llamado Siglo de Oro Valenciano. Analizó la portada y la entrada que se enmarca por un arco conopial flanqueado por pináculos. Se decora con adornos de cardinas y en la parte superior con una macolla en forma de cruz. En el tímpano de la portada hay una copia de un tondo atribuido a Buglioni y también según autores a Luca della Robbia, cuyo original realizado en mayólica (barro cocido) se encuentra en el Museo Nacional de Cerámica.
En el interior D. Amando analizó la cúpula de la Iglesia, que es gótica del s. XV, pero ahora está recubierto por el barroco de fines del siglo XVII. El revestimiento decorativo lo forman medallones adornados con follajes y angelotes esculpidos en yeso. Y el claustro del convento que recuerda al del Convento del Carmen con arcos ojivales, con pilares fuertes, existe un pozo. El claustro es de estilo gótico, de finales del siglo XV y su belleza se debe sobre todo a la perfecta armonía de sus líneas y a la gran calidad de la talla de la piedra. El claustro mayor se configura en dos plantas. Y el sepulcro de doña María de Castilla.
Iglesia de Santa Mónica: La actual iglesia tiene planta de cruz latina, atrio, coro alto a los pies, seis capillas laterales (tres por lado), cúpula con linterna sobre pechinas en el crucero y dos espadañas a ambos lados de la fachada. Tres puertas de acceso una por cada nave de la iglesia, pero que en la práctica es solo una. En 1691 se dan por terminadas las obras del templo. En 1742 se construiría una cripta subterránea para enterramientos, cripta que en la actualidad aun existe.